Trucos para ahorrar con gatos

No sé si a vosotros os pasará lo mismo, pero cuando en casa toca revisión de las cuentas, es evidente que nuestros gatos son consumidores de una porción nada desdeñable del presupuesto doméstico: comida, arena, juguetes, veterinario... Todo es poco para ellos y siempre buscamos proporcionarles lo mejor dentro de nuestras posibilidades aunque eso, no nos engañemos, implique gastarse dinero. Pero a pesar de este hecho innegable, lo cierto es que existen truquillos y consejos que nos pueden ayudar a llegar a fin de mes un pelín más desahogados sin dejar de cuidar de maravilla a nuestros pequeños. Y así, con la cuesta de enero prácticamente finiquitada y la de febrero a punto de esternarse en el calendario, se nos ha ocurrido recopilar y comentar en nuestra primera entrada de 2014 en C. T. C. algunas ideas originales, ecológicas e incluso sorprendentes que pueden servirnos para evitar que gastemos algunos eurillos sin renunciar a unas atenciones con nuestros felinos de como mínimo cinco estrellas. ¿Os apetece descubrirlas?

Alimentación:

• ¿Hartos de tirar pienso porque después de unas horas en el comedero vuestros gatos se niegan a comerlo? Muchas veces esto se debe a que al dejar la comida a libre disposición el alimento, que está en perfecto estado, pierde parte de su aroma, algo que no gusta a unos comensales un poco tiquismiquis. Pues ante esta situación, tenemos dos posibilidades: la primera, añadir unos cuantos granos de pienso nuevo, algunas chuches o algún complemento tipo levdura de cerveza en copos por encima del pienso viejo, ayudando en muchas ocasiones este simple gesto a que se animen a comer. La segunda opción es cambiar todo el pienso viejo de cacharro y colocarlo en un lugar distinto generando una novedad. En casa y después de tiempo tirando a la basura cantidad de pienso empezamos a sacar lo que no se comían a la terraza y os aseguro que cae de lo lindo ;)

Higiene:

• Nosotros estamos muy contentos con la arena aglomerante vegetal que usamos y por eso debo indicar que, aunque lo difundo, este truco sorprendente no lo hemos probado. Pero se dice, se cuenta y se rumorea a lo largo y ancho de los mentideros de la red que mezclando arena normal con pan rallado se vuelve aglomerante: la proporción viene a ser de 2 kg de pan rallado por cada 5 kg de arena y por lo visto esta mezcla casera funciona bastante bien... No os negaremos que el compuesto y sus cualidades nos intrigan, así que si alguien lo ha probado que no deje de contarnos.

Juguetes:

•  La faceta lúdica constituye un área fundamental en el mundo felino en la que, por suerte, podemos ahorrar muchos euros con muy poco esfuerzo porque ¿qué gato se resite a jugar con un tapón de corcho, una goma del pelo o una bola de papel? Prácticamente todo vale a la hora de que nuestros gatos se lo pasen de lo lindo. Y ¿qué decir de las cajas de cartón? Diversión asegurada dando una segunda vida a embalajes usados. Aunque si hay un juguete ecológico y 100% reciclado que nos encanta en C. T. C. es la auténtica y genuina bola de pelo de gato: aprovecharemos las pelusas generadas durante el cepillado de nuestros peques proporcionándoles una juerga de primera. ¿Qué más se puede pedir?

Limpieza:

• Estropajos, guantes de fregar y medias pueden ser excelentes (y baratos) aliados a la hora de limpiar de pelos la tela que forra las plataformas de los árboles rascadores o las tapicerías de sillas y sofás manteniendo nuestros hogares de punta en blanco y ahorrando de paso unos eurillos en utensilios de limpieza que no siempre son eficaces.

Cuidados:

• Por desgracia no podemos transmitir ningún truco que nos ayude a ahorrar a la hora de visitar al veterinario (menos aún desde que el IVA que grava la atención médica a animales subió hasta el 21% hace más de un año) Pero si de cuidados médicos se trata, lo cierto es que sí que contamos con un sustituto casero del collar isabelino que nos ayudará durante la cura de determinadas lesiones o convalecencias de nuestros felinos: os estamos hablando del vestido para gatos reciclado, un top ten de la moda felina cuando las circunstancias obligan, ideal por ejemplo en postoperatorios tras la esterilización de hembras.

Y dicho esto, hasta aquí llegan por hoy nuestros consejos para ahorrar, reciclar y hacernos la vida más fácil cuidando de nuestros gatos. Esperamos, como poco, haberos pintado una sonrisa de oreja a oreja, que eso ya nos haría felices. Aunque si después de leer la entrada os decidís a probar alguno de los trucos y os funciona, ¡miel sobre hojuelas! No dejéis de contarnos vuestra experiencia y, cómo no, de compartir vuestros propios truquillos. ¿Alguien se anima?

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Nos ponemos serios...: Sentido del humor y triquiñuelas caseras aparte, no olvidemos nunca que tener un gato siempre implica gastos, algunos previsibles y otros inesperados, y que esto es algo a tener muy en cuenta antes de asumir un cuidado responsable.