6 de noviembre de 2014

Ver o no ver, ¿esa es la cuestión?

Elmo con pajarita
Elmo, perfecto en su "imperfección"...
Cuando alguien se plantea adoptar un gato, suele pensar en un minino ideal, pero la cruda realidad pronto nos demuestra que muchos de los que buscan hogar no son lo que definiríamos a priori como animales perfectos. Así, entre los gatos que esperan a lo largo y ancho de nuestras protectoras hay muchos que por circunstancias de la vida (accidentes, malformaciones congénitas, enfermedades,...) presentan defectos o minusvalías físicas más o menos evidentes que les hacen entrar a formar parte del grupo menos adoptable de los animales con necesidades especiales, dentro del cual los problemas de audición, las discapacidades motoras (cojeras, amputación de miembros, falta de coordinación,...) y las limitaciones visuales (cegueras, atrofia y/o lesiones de los ojos,...) se llevan la palma. Con la intención de romper una lanza a favor de todos estos animales que merecen tanto como cualquier otro su oportunidad, nosotros hoy vamos a centrarnos en los problemas oculares porque a pesar de ser llamativos y muy frecuentes no resultan apenas limitantes para el gato, cuya calidad de vida en un entorno controlado puede ser muy buena. Y conste que os hablamos con conocimiento de causa, ya que en casa convivimos con Elmo, tuerto desde pequeño y con opacidades en el ojo que conserva. Y una cosa podemos dejar sentada desde ya: nuestro pirata está tan adaptado a su situación que hablar de necesidades especiales, al menos en su caso, está de más.

¿Por qué hay tantos gatos con problemas oculares? Mientras algunos lo son por nacimiento, traumatismos o degeneración derivada de la edad, una inmensa mayoría de gatos ciegos y tuertos lo son desde bebés a causa de la gripe felina (enfermedad habitual en gatitos y gatos muy mayores o con sistemas inmunes deprimidos provocada por el herpesvirus y/o por el calicivirus) Uno de los síntomas más evidentes, junto con el moqueo constante y los estornudos, es la conjuntivitis bilateral, que puede acabar con la ulceración de la córnea y la perforación y atrofia total del ojo si no se trata correctamente y a tiempo.

Gatas con problemas oculares
Zamora y Soria son dos gatas con evidentes síntomas oculares. Si no se las atiende a tiempo...

Sea como sea, si nos encontramos con algún gato o gatito que presente síntomas oculares entre los que destacamos las secreciones espesas o legañas y la irritación de la conjuntiva (los típicos gatos con los ojos pegados, rojos y medio cerrados), es fundamental que acudamos cuanto antes a un veterinario que lo revise, diagnostique y paute el tratamiento apropiado para mitigar los síntomas y sus posibles secuelas.

Gato tuerto
Tigris, un pirata en busca de familia.
Gatos tuertos. El caso de Elmo. Cuando nuestro Elmo llegó, lo hizo en un estado avanzado de infección por calicivirus y herpesvirus y nada se pudo hacer por uno de sus ojos, pero, gracias al tratamiento veterinario logramos salvar el otro, lo que, a pesar de cierta opacidad perenne en la córnea, le ha brindado un nivel de independencia que le permite llevar una vida prácticamente normal. Es cierto que algunos giros no los controla bien y algún golpe que otro se ha dado, pero por lo demás, el día a día de nuestro peque es igual o incluso más intenso que el de Rumbo o Noa, tanto que al describir sus trastadas y ocurrencias nadie que no lo sepa diría que estamos hablando de un gato tuerto.

En su caso, como en el de muchos otros gatos, fue necesaria la extirpación quirúrgica o enucleación del globo ocular comprometido, procediéndose de paso al cierre de sus párpados por higiene, pero se trata de un procedimiento que debe ser valorado por el veterinario y la familia según las circunstancias, dándose situaciones en las que no es necesario enuclear y otras en las que se opta incluso por implantar prótesis oculares con fines estéticos (aunque a veces conllevan complicaciones, sobre todo en gatos)

Antía, gata ciega
Antía, ciega, busca hogar (Foto: Elena Kaede)
¿Y qué pasa con los gatos ciegos? Además de la ceguera de nacimiento, hay ocasiones en las que son los dos ojos los afectados por una enfermedad o en un accidente y la pérdida de visión del gato es total. En estos casos, la adaptación de los felinos a la ceguera suele resultar sorprendente por su rapidez para los humanos. Tanto es así que cuando la pérdida de visión es progresiva y permite al gato ir acomodándose poco a poco, hay propietarios que ni se dan cuenta de lo que pasa durante mucho tiempo, llegando a convivir con un gato invidente sin percatarse de lo que ha ocurrido. Y es que, cuando un sentido como la vista falla, el cerebro suple esta carencia agudizando los restantes, lo que permite a estos gatos domésticos adaptarse muy bien a su nuevo estado aunque hayan visto con anterioridad.

Eso sí, es importante que el entorno donde se mueva un gato ciego sea estable, manteniendo su comida, su agua, su cama y su arena siempre en el mismo sitio y debiendo tener mucho cuidado con los cambios de lugar de muebles y enseres, así como precaución con peligros como escaleras o piscinas.

¿Ver o no ver? Puede parecer mentira, pero los gatos tuertos o ciegos no ven afectadas sus rutinas cotidianas prácticamente en nada si mantenemos un entorno mínimamente controlado. ¿Cuidados veterinarios? Quizá al principio del proceso en un intento de salvar la visión (tratamientos con gotas, revisiones...) y algunas curas si hay cirugía de por medio. Y hasta aquí llegarían básicamente sus necesidades especiales. En cuanto a sus emociones al respecto, ellos son así y no sufren lo más mínimo por la falta de visión en un ojo o los dos: se adaptan y siguen adelante. Y aunque convivan con otros gatos, no se consideran diferentes, son uno más. Así, no es justo que nosotros les tratemos como inferiores, pues no lo son: sintamos menos compasión y démoseles más oportunidades porque os aseguro que merece la pena recorrer el mundo más allá de lo meramente visible y aprender a valorarlo con el resto de nuestros sentidos, descubriendo la perfección que muchas veces se oculta dentro de la obvia imperfección.

¡Ojo! Y nunca mejor dicho... Debe quedar claro que al deciros que la vida de un gato con limitación visual parcial o total es de lo más normal, nos estamos refiriendo a gatos caseros sin acceso al exterior, que vivir en las calles sin ver bien o no ver en absoluto ya es harina de otro costal...

Algunos casos. Los gatos que ilustran la entrada además de Elmo son Antía y Tigris a cargo de la protectora Adypa de Aspe (Alicante) y Soria y Zamora, dos gatitas difundidas por Felinos Bilbao y que la semana pasada estaban en el estado en el que se las ve en las fotos. Todos buscan adopción responsable, pero las dos pequeñas bilbaínas necesitan urgentemente acogidas y padrinos que las ayuden si no a salvar sus ojitos sí a descubrir el mundo sin verlo. ¿Te animas a ser su lazarillo?


Nos editamos... Y lo hacemos con pena a 8 de noviembre porque la pequeña Soria no ha aguantado más y se nos ha ido al cielo de los gatos... Descansa en paz, preciosa, porque a veces las cosas no salen como nos gustaría...

Nos volvemos a editar con pena... Porque el 3 de diciembre Tigris cruzó al país al otro lado del arcoiris de forma repentina, sin haber encontrado en este mundo el amor de un hogar para él solo... Adiós, pequeño... Ojalá ahora seas muy feliz jugando con Soria...

10 comentarios:

  1. Hola Gatera, me pongo muy nerviosa pensando en los gatitops y perritos que hay en las protectoras. Yo me he hecho cargo de animales enfermitos que me he encontrado. Y de los míos por supuesto, pero a la hora de adoptar al no disponer de una buena condición económica no los cojo que necesiten tratamientos para no tener un gasto que no podría sobrellevar, Lo que si que hago es que los adopto adultos, A Ramsés lo cogí con cuatro años.
    Besos para ti Ronroneos para La gatera, Elmo es un crack.

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    1. Esa es precisamente la idea que queremos desterrar, Lídia. Estos gatetes tienen limitación total o parcial en la vista, pero, una vez instaurada su dolencia los cuidados y atenciones especiales son mínimos (casi inexistentes) en la mayoría de los casos. Tú conoces las andanzas de Elmo y es un gato divertido, activo y muy feliz. Por eso, cuando leo que hay gente que no adopta a un gato porque le falta un ojito o los dos, me da una penita... Ellos también merecen una oportunidad.

      En cuanto a lo de adoptar adultos, es una gran decisión, que en cuanto un gato supera los 6 meses pierde muchísimas opciones de ser adoptado y es fantástico que haya gente como tú que tiene claro que la experiencia y la edad también merecen la pena ;)

      ¡Ronroneos a tus chicarrones y maulliditos satisfechos de nuestro pirata crack!

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  2. Aysss que penita me dan los que están esperando acogida. La pena de esto es que los gastos que ocasionan a veces este tipo de enfermedades no se pueden sobrellevar y eso echa para atrás muchas adopciones, espero que tengan una familia que los acoja.

    Elmo me encanta con esa pajarita, está guapísimo.

    Besos

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    1. Lo cierto es que es importante tener en cuenta la economía a la hora de adoptar, pero hemos de tener claro que un gato "perfecto" no garantiza nada: pueden enfermar como el que más y ya tenemos ahí un gasto veterinario imprevisto...

      Mi experiencia con Elmo es que los cuidados y gastos por sus ojos, más allá de los primeros meses, han sido mínimos. Eso sí, hemos tenido salidas y desembolsos de urgencia a causa de uñas arrancadas, alguna mala caída, ingesta de las flores de un ramo, etc. Y esto, al menos a mí, me da qué pensar...

      Ronroneos, Manderley. Y gracias por pasarte por C. T. C.

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    2. Totalmente de acuerdo, Gatera. Adoptar un gato sano no garantiza nada. Puede desarrollar una dolencia crónica que necesita de una constante supervisión veterinaria, medicamentos etc. Creo que eso es parte del problema de los abandonos. Hay que tener en cuenta ese factor antes de decidirse a adoptar. Un saludo

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    3. Todo es cuestión de perspectiva y estoy convencida de que, para bien o para mal, en esta vida no hay garantías de nada. Por desgracia, las enfermedades imprevistas están, como bien dices, en el origen de muchos abandonos, cuando es una posibilidad plausible que se debería valorar antes de decidirnos a adoptar... Pero parece que el capricho y el ansia mal controlados, en esto como en muchas otras facetas de la vida, imperan por encima de la razón.

      ¡Ronroneos y un saludo, Mi Miga! Gracias por opinar :)

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  3. Esa foto de Antía la hice yo :) :) :) Y a Tigris lo conozco también personalmente y son dos amores de gatos, han vivido dos historias muy complicadas y merecen tener una buena familia. Son gatos de lo más normal en su día a día: juegan, ronronean, maullan y te quitan el mejor sitio del sofá si les dejas. ¡Eh! Y son guapos, guapos, guapos.
    ¡Miau!

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    1. ¿Guapos solo? ¡Guapísimos! Me encanta descubrir que eres la autora de la fotografía de Antía porque es preciosa. Y sí, Elena, los gatos con deficiencias visuales son de lo más normal: los raros somos nosotros si les consideramos menos que a sus compañeros con buena vista.

      ¡Ronroneos y encantados de que nos visites!

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  4. HOla..primera vez que veo su foro, y necesito de sus consejos, tengo dos hermosas gatas sin impedimentos hasta hoy, hace 5 días se desaparecio una y me llego con ojito destrozado el veterinario no pudo hacer nada por el ojito, mi pregunta es como la cuido ahora, normal como siempre, gracias

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    1. Hola, Arellys.

      Si lo que te preocupa es la lesión en sí, deberás cuidar de tu pequeña siguiendo el asesoramiento veterinario y por aparatoso que parezca, curará. Ahora, si lo que te preocupa es su comportamiento a partir de ahora y cómo debes ayudarla, tranquila: en cuanto no tenga dolor ni molestias en la zona ella se adaptará perfectamente a la nueva situación.

      ¡Ronroneos! ;)

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