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| Jeringa para dar pastillas :) |
A pesar de que a priori y sobre todo para gateros novatos puede parecer una misión imposible, no son tan raras las ocasiones a lo largo de la vida de nuestro gato en las que administrar una pastilla va a ser algo necesario: desparasitaciones periódicas y medicaciones puntuales o crónicas son situaciones que van a poner a prueba nuestra maña para que nuestro lindo gatito se trague una cápsula o un comprimido. Y si de ello depende su salud, nada mejor que nos pongamos manos a la obra siempre con cariño pero también con seguridad y decisión para que logremos salir airosos ante esta prueba que tantos ríos de tinta ha hecho correr en forma de chistes y chascarrillos. Y para perfeccionar nuestra técnica, ahí van unos sabios consejos recopilados aquí y allá complementados por unos ilustrativos vídeos y aderezados con nuestra propia experiencia sobre cómo dar una pastilla a un gato que esperamos que os resulten útiles y que os aseguramos desde ya que, como teoría, no tienen desperdicio. ¿Vamos a ello?
Algunas personas camuflan las pastillas en el alimento húmedo; otras, las trituran y mezclan con agua o con un pegote de malta... En esto, como en casi todo, cada maestrillo tienen sus manías y resultan variados los métodos alternativos que a veces ideamos con tal de evitar el más sencillo y eficaz: introducir el comprimido directamente en la boca de nuestro gato. Y aunque los truquillos pueden salvarnos la papeleta en algunos casos, no dejan de tener como inconveniente principal que nunca podremos estar seguros de que el gato ha ingerido la dosis completa que le corresponde y que no sirven en casos en los que la pastilla no debe o no puede partirse... Así que si convivimos con felinos, no está de más que aprendamos de una vez cómo se da una pastilla al gato sin morir en el intento.
¿Objetivo? Que se tome la pastilla: Podríamos pasarnos horas explicando cómo hay que sujetar la cabeza, la pastilla y al gato, pero gracias a este vídeo de la clínica Gattos, podemos comprobarlo en 14 segundos cómodamente vía YouTube. Y es que, para cosas como esta, os aseguro que un ejemplo vale más que mil palabras.
¿A que es fácil? Y no es que lo parezca porque el gato del vídeo es más bueno que el pan, que obviamente eso ayuda: es que, cuando te pones en serio, resulta más sencillito de lo que parece...
Este otro recopilatorio de iCatCare e ISFM es algo más largo pero muy completo: en él se reúnen tres vídeos donde nos enseñan con detenimiento cómo sujetar al gato, cómo abrirle la boca y cómo introducir la pastilla. Además, nos presentan elementos de lo más útiles en estas lides como las jeringuillas de comprimidos o los partidores de pastillas, inventos ingeniosos que ayudan a salir airosos de este trago (y nunca mejor dicho)
Para terminar con la lección, un último vídeo de Royal Canin con Carlos Rodríguez, el mediático veterinario del programa radiofónico de Onda Cero "Como el perro y el gato", en el que en poco más de un minuto nos presentan las opciones más populares en esto de darle un comprimido a un felino: directamente en la boca, con malta, con agua,...
A modo de resumen: Visto lo visto, la manera correcta de hacerlo está clara y solamente os queda practicar. Aunque, como repaso general, ahí van los puntos más importantes a tener en cuenta.
Algunas personas camuflan las pastillas en el alimento húmedo; otras, las trituran y mezclan con agua o con un pegote de malta... En esto, como en casi todo, cada maestrillo tienen sus manías y resultan variados los métodos alternativos que a veces ideamos con tal de evitar el más sencillo y eficaz: introducir el comprimido directamente en la boca de nuestro gato. Y aunque los truquillos pueden salvarnos la papeleta en algunos casos, no dejan de tener como inconveniente principal que nunca podremos estar seguros de que el gato ha ingerido la dosis completa que le corresponde y que no sirven en casos en los que la pastilla no debe o no puede partirse... Así que si convivimos con felinos, no está de más que aprendamos de una vez cómo se da una pastilla al gato sin morir en el intento.
¿Objetivo? Que se tome la pastilla: Podríamos pasarnos horas explicando cómo hay que sujetar la cabeza, la pastilla y al gato, pero gracias a este vídeo de la clínica Gattos, podemos comprobarlo en 14 segundos cómodamente vía YouTube. Y es que, para cosas como esta, os aseguro que un ejemplo vale más que mil palabras.
¿A que es fácil? Y no es que lo parezca porque el gato del vídeo es más bueno que el pan, que obviamente eso ayuda: es que, cuando te pones en serio, resulta más sencillito de lo que parece...
Este otro recopilatorio de iCatCare e ISFM es algo más largo pero muy completo: en él se reúnen tres vídeos donde nos enseñan con detenimiento cómo sujetar al gato, cómo abrirle la boca y cómo introducir la pastilla. Además, nos presentan elementos de lo más útiles en estas lides como las jeringuillas de comprimidos o los partidores de pastillas, inventos ingeniosos que ayudan a salir airosos de este trago (y nunca mejor dicho)
Para terminar con la lección, un último vídeo de Royal Canin con Carlos Rodríguez, el mediático veterinario del programa radiofónico de Onda Cero "Como el perro y el gato", en el que en poco más de un minuto nos presentan las opciones más populares en esto de darle un comprimido a un felino: directamente en la boca, con malta, con agua,...
A modo de resumen: Visto lo visto, la manera correcta de hacerlo está clara y solamente os queda practicar. Aunque, como repaso general, ahí van los puntos más importantes a tener en cuenta.
- Nadie mejor que tú conoce el carácter y las costumbres de tu gato: trata de elegir un momento en el que esté tranquilo y relajado y aprovéchalo.
- ¡No te pongas nervioso! Si tú estás asustado, tu gato se va a dar cuenta de que algo no marcha bien y se va a poner en guardia. Afronta el momento con calma pero con seguridad y sin titubeos.
- Tenlo todo preparado: de nada sirve que sujetes perfectamente al gato si no tienes la pastilla a mano...
- A la hora de abrirle la boca, ¡cuidado con los dedos! Colócalos estratégicamente en los huecos o bajo los incisivos pero nunca debajo de colmillos o muelas.
- Introduce el comprimido bastante, proyectándolo más allá de la mitad posterior de la lengua. Conseguirás así que lo trague fácilmente gracias al reflejo de deglución.
- Una jeringa para comprimidos facilita el proceso y es muy fácil de utilizar. Nosotros tenemos una y os aseguro que merece la pena. ¿Dónde comprarla? La nuestra es de Tiendanimal y su precio es de 3,25€, una buena compra sobre todo en caso de medicaciones crónicas.
- No administres los medicamentos en seco: inmediatamente después de darle la pastilla, haz que el gato beba agua usando una jeringuilla normal o dale de comer alimento húmedo, evitando así que el comprimido se le quede adherido al esófago y pueda provocarle lesiones.
- Y después de la pastilla, ¡premio! No hagamos de este momento un suplicio: una vez tomada la pastillita, nada mejor que unas chuches o un poco de juego para terminar con una sonrisa. Cuanto menos trauma, más sencillo será la próxima vez.
Ajajajjajaja yo las pocas veces que les he tenido que dar pastillas a mis gatos, se las he puesto directamente en la garganta en un gesto rápido y ale para adentro !!!!!! jajjajaja uff que mala soyyyyyy
ResponderEliminarRonroneos Gatunos.
De mala nada, Lídia: esa es la mejor opción, meter la pastilla directamente al fondo de la boca, casi a la garganta, con seguridad y ¡glup!, que traguen sin escupir.
EliminarRonroneos y gracias por compartir técnica :)
Yo no tengo mayor problema con los míos.
ResponderEliminarPamino es un amor, así que como hacía con mi perra, que e paz descanse: abro boca, meto pastilla, cierro boca, espero a que trague dos veces o tres para cerciorarme. Fin.
Midori me respeta así que hago lo mismo que con Pamino, pero con más drama por su parte y cabreo que se le pasa a los cinco minutos ;)
Y Oliver... Oliver no tengo que hacer más que dársela en la mano o, si acaso, con malta... pero... se come todo. Es una aspiradora. ;) Tengo suerte.
Leído tu comentario, Maggie, tus tres chicos son unos soles y se toman sus pastillas sin demasiados problemas. Aunque el caso de Oliver es para tener en cuenta: ¡que se toma las pastis solito! Eso es colaborar y lo demás, tonterías ;)
EliminarMiau-gracias por opinar, familia.
Sí sí, se las toma solito, igual que las pelusas, los mondongos de pelos que encuentra de sus hermanos, papeles... XD Lo que más le gusta de la hora del cepillado es el mondongo de pelos que dejo encima de la mesa para tirar después, que intenta llevarse a la boca el muy bichejo XD
EliminarLo del mondongo de pelo me suena: deberías probar a hacerle un juguete de pelo de gato. Parece raro pero a muchos gatos, entre otros nuestro Elmo, les encanta esta bola a base de pelusa felina. Y si lo haces, ¡ya nos contarás!
EliminarRonroneos ;)
Nosotros se la damos con un mini trocito de pavo y se la comen tan panchos!
ResponderEliminarCamuflaje casi perfecto, salvo en el caso de gatos como Noa que no picotean nada de nada: ni jamón, ni pavito, ni chuches... ¡Una chicuela rara, rara!
EliminarEn fin, ojalá que el método del trocito os sirva muchos años :)
¡Ronroneos!
Yo he probado de todo: camuflarla en la comida, camuflarla en pavo, camuflarla en malta... Al final el método "aquí te pillo aquí te mato" es, sin duda, el más eficaz, aunque reconozco que nunca he tenido que darle una pastilla a Sirio, el día que tenga que hacerlo ya os contaré...
ResponderEliminarPues sí, Gema, porque cada gato es un mundo y con algunos que no hay tonterías que valgan... En fin, sea como sea, tú eres de los nuestros: pastilla directamente a la boca y a tragar :)
Eliminar¡Un saludo y gracias por opinar!
Hola , en casa quien más tiempo tuvo que tomar pastillas fue Efi y con ella usaban el metodo abrir boca y "padentro". Yo suelo succionarlas entre lo que me pongan y Renatico, que tiene que tomar una todas las noches para la insuficiencia renal, la tomaba camuflada con ...depende del día, aunque a veces la escupía. Pero una veterinaria, les ha dado el mejor consejo del mundo hasta la fecha. UNA PELOTITA DE MANTEQUILLA, con la pasti dentro. O simplemente untarla un poco, eso ya depende de cómo sea quien se la va a tomar.
ResponderEliminarFijáos que ahora, cuando alguien coje una caja de medicinas, Renato viene corriendo y maullando, creyendo que le van a dar la suya.
De verdad que en casa ha sido un buen descubrimiento, y además la pastilla no se atora al tragarla, ya que está lubricada.
¡probadlo ...bueno , mejor que no tengáis que probarlo!
Mmmm... Mantequilla... Pues es una buena opción para gatetes a los que les guste y además, eso de que esté lubricada ayuda a prevenir las lesiones de esófago. Nos anotamos el truco, aunque mejor, como bien decís, no tener que probarlo :)
EliminarUn saludete y gracias por el comentario, familia.
Voy a probar con en truco de Carlitos el ocupa, porque generalmente uso lo de "abrir boca y tan dentro cómo pueda" y además sólo funciona si pillo a Lorenza desprevenida y no me ve venir con la pastillita. Gracias. Saludos miau!
ResponderEliminarA ver si con el truco de Carlitos triunfas, Mi Miga, que cuando hay que dar pastillas mucho tiempo lo ideal es encontrar un método agradable para pasar el trago (y nunca mejor dicho)
Eliminar¡Ronroneos y ya nos contarás!